Hoy vamos a hablaros de las quemaduras, las cuales se tratan de una de las lesiones más comunes en nuestro día a día. ¿Cuántas veces se ha quemado tras un pequeño descuido? Seguro que más de una vez.
La mayoría de las quemaduras que se producen en nuestro país son de primer grado y más del 60% se producen en nuestro hogar.
Cabe destacar que más del 60% de las quemaduras que son atendidas en los hospitales de nuestro país, se producen en el hogar, siendo la cocina, el lugar dónde más siniestros de este tipo se producen. La mayoría son de poca importancia, sin embargo, hay ciertas quemaduras que pueden afectarnos de manera muy seria a nuestra salud, por tanto, es importante conocer como debemos de actuar cuando ello suceda.
TIPOS DE QUEMADURAS. ACTUACIÓN
Las quemaduras se diferencian en tres tipos, las cuales las detallamos a continuación:
- Primer Grado:
La mayoría de las quemaduras son de este tipo. Quemaduras leves muy superficiales. Afectan a la epidermis con un leve enrojecimiento y algo de inflamación.
Lo primero que debemos de hacer una vez que hemos sufrido una quemadura de este tipo, es refrescar la quemadura y la zona con agua fría. Posteriormente se recomienda beber mucho líquido en las horas posteriores.
- Segundo Grado:
Más serias que las anteriores y se diferencian por la aparición de ampollas en la piel. Provocan lesiones de la epidermis y suele verse afectada la dermis. Son muy dolorosas.
En este caso, lo primero que debemos de hacer es refrescar la zona afectada con agua abundante durante 5-10 minutos. Posteriormente y en función de como se encuentre la ampolla, debemos de actuar sobre ella. En el caso de que se encuentre abierta o rota, se tratará como una herida más. En caso contrario, aplicar un antiséptico y cubrir la quemadura con paños limpios o compresas.
- Tercer Grado:
El estado más grave de los tres. Quemaduras que producen una destrucción de los tejidos y de la piel. Provocan la lesión completa de la epidermis y una lesión grave de la dermis. Se suele perder la sensación de dolor por la afectación de los nervios.
Lo primero que debemos de hacer es apagar el fuego en la zona afectada de la manera que sea; Tierra, mantas, revolcándose… Después, lo primero que haremos será aplicar agua abundante en la zona afectada durante unos 10 minutos paraposteriormente proteger la zona afectada con una manta o toalla humedecida con agua, suero o agua oxigenada hasta que podamos acudir a un centro sanitario, ya que este tipo de quemaduras deben de ser tratadas por profesionales.
QUE NO DEBEMOS DE HACER
Hay ciertas cosas que en ningún caso debemos de hacer ante cualquier tipo de quemadura que suframos. Te las detallamos a continuación:
- No aplicar ningún tipo de pomada, crema ni pasta de dientes sobre la quemadura. Únicamente aplicaremos agua abundante sobre la zona afectada.
- No aplicar agua demasiado fría sobre la zona afectada, pues podríamos provocar una hipotermia a la persona con la quemadura
- No romper las ampollas para evitar posibles infecciones gracias al líquido interior.
- No despegar cualquier elemento que esté pegado a la piel de la zona afectada.
CUIDADOS POSTERIORES
Una vez que hemos sufrido la quemadura y ésta ha sido curada, debemos de seguir cuidando nuestra piel de la zona afectada. Es muy importante seguir estos consejos:
- Lavar la zona afectada con jabón neutro e hidratar la piel a diario con crema, de manera que evitemos el picor que se produce en días posteriores en la fase de cicatrización.
- Evitar en lo posible la exposición solar sobre la zona afectada.
- Usar cremas con filtro solar (alta protección)
Cuidado con los remedios caseros que circulan por Internet, ya que no todos son recomendables y pueden traer consecuencias muy negativas.
Os dejamos una «Guía de Prevención y cuidados de las personas con quemaduras«, editado por la Consejería Andaluza de Salud, dónde encontrarás una información más detallada y completa de como actuar ante una quemadura.
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