Atención: Con la Reforma de la Ley de Tráfico de hace un par de años, el conductor es el único responsable en la mayoría de los accidentes por los animales cinegéticos.
A la hora de contratar un seguro de coche, buscamos siempre un producto que cubra nuestras necesidades básicas a un precio lo más ajustado posible, optando por una de las diferentes modalidades que existen en el mercado -todo riesgo, con franquicia o a terceros- en sus productos básicos, pero debemos de ir más allá ya que es muy importante ver con detalle las coberturas que nos ofrecen a mayores, que no suelen estar incluidas en la póliza básica. Y hoy vamos a hablar de una de ellas, que en nuestra opinión es una de las más importantes, la de los animales cinegéticos.
Las compañías ofrecen a sus clientes una cobertura opcional en la póliza, con un suplemento, que cubre este tipo de accidentes.
¿Que es un animal cinegético?
Lo primero de todo, tenemos que tener bien claro a que llamamos un animal cinegético. Según está establecido en el Real Decreto 1095/89, correspondiente al Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, los define a las especies objeto de caza y pesca y a su vez en mamíferos, aves y peces, como por ejemplo el corzo, ciervo, paloma, tótola, liebre, paloma, pato, faisán, codorniz, jabalí…. etc
En que consiste lA reforma Ley de Tráfico
Hasta hace un par de años, la ley no consideraba culpable al conductor en accidentes ocasionados por animales de esta categoría, pero con la reforma de la Ley sobre el Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial, aprobado por el Real Decreto Legislativo 339/1990 del 2 de Marzo de 2014, si lo es y ahora la culpa recaerá sobre el conductor en la mayoría de los casos.
La Ley es muy clara, en los accidentes de tráfico que se vean implicados animales considerados cinegéticos, la responsabilidad de los daños a personas o bienes ocasionados, caerá sobre el conductor del vehículo, sin que se pueda reclamar.
¿Que debo de hacer para evitarlo?
Dada la situación actual y el problema que acarrea a los conductores cuando hay un accidente de este tipo, las aseguradoras han ampliados las coberturas de sus pólizas para que el conductor pueda estar seguro y no tenga que responder en estas situaciones.
Nos encontramos con dos opciones:
- 1.- Seguro a Todo Riesgo: En este caso, no nos debemos de preocupar, ya que al estar a todo riesgo, estamos cubiertos por la compañía, la cual se hará cargo de todos los gastos ocasionados, tanto de nuestro vehículo como de un tercero si estuviera implicado (responsabilidad civil).
En aquellos productos que sean de Todo Riesgo pero bajo con una franquicia, el conductor asumirá esa franquicia, mientras que la compañía se hará cargo de la diferencia que exista entre el importe total y la franquicia abonada por el cliente
- 2.- Seguros a Terceros: En estos casos, la compañía no cubre los gastos ocasionados a menos que el conductor contrate una cobertura de «Animales Cinegéticos» que ofrecen a día de hoy como opcional, las compañías del mercado. Gracias a esta cobertura, que suele tener un precio medio de 20-30€ al año, nos cubrirá de todos los gastos que podamos tener.Independientemente de todo ello, es importante destacar, que para que una compañía se haga cargo del accidente, es obligatorio que haya un atestado elaborado por la autoridad que haya intervenido en el accidente.
Datos Preocupantes
Según datos publicados el Centro de Estudios de Seguridad Vial Ponle Freno – AXA, en los años 2013, 2014 y 2015 se han contabilizado más de 3.000 siniestros cada año contra animales, de los que el 62% afectaron a especies de caza, el 37% a animales domésticos (sube a más del 40% en el año 2015) y el 1% a aves. Corzos, ciervos y zorros son las especies de caza más afectadas, con más del 95% del total.
Importante destacar también que el 6%-8% de los accidentes, provoca lesiones corporales a los ocupantes del vehículo y las provincias dónde mayor número de accidentes de tráfico de este tipo se producen, son: Burgos, Coruña, Soria, León y Orense.
Qué hacer en caso de accidente con un animal
Aquí te damos unos pequeños consejos para intentar evitar este tipo de accidentes.
- Zonas de Riesgo: Hay zonas que son más peligrosas y que a través de señales, nos avisan de que hay un riesgo existente mayor. En estos tramos se recomienda reducir la velocidad, de manera que tengamos una mayor capacidad de reacción ante cualquier imprevisto. Hay que tener en cuenta que la colisiones con animales de este tipo son más frecuentes en noches despejadas y claras.
- Evitar un volantazo y movimientos bruscos: Lo único que podemos conseguir es provocar un accidente mucho más grave, ya que perderíamos el control de nuestro vehículo. Debemos de pisar el freno de forma firme y rápida buscando que el impacto sea en ángulo y no frontalmente. Se recomienda que justo antes del impacto con el animal, levantar el pie del freno para reducir las posibilidades de un impacto del animal en nuestro parabrisas.
- Una vez que se produzca el impacto, detenerse cuando sea posible en un lugar seguro fuera de la calzada y avisar a la Autoridad para comunicar lo sucedido y esperar a que ellos lleguen sin hacer al animal o animales heridos. Finalmente, se dará el parte al seguro.
En nuestra opinión, se trata de una cobertura que debería de ser obligatoria, a día de hoy, el conductor se encuentra indefenso ante este tipo de accidentes. La parte positiva es que dichas coberturas están siendo ofrecidas por las compañías un precio asumible si lo comparamos con la media del gasto que supone un accidente de este tipo en nuestro país, que según la Dirección General de Tráfico, asciende 1.500€ por accidente.