Aunque la sanidad pública española sigue siendo uno de los sistemas más eficientes y justos del mundo, lo cierto es que la reciente crisis económica y las medidas de ajuste puestas en práctica para su subsanación han afectado a la eficacia de los servicios. Las listas de espera en patologías de distinta gravedad, así como la imposibilidad de recibir un tratamiento personalizado por lo saturado de las consultas son solo alguno de los criterios que han impulsado el auge de la contratación de seguros privados, un incremento que se hace evidente a la luz de las cifras.
Son muchas las respuestas a la pregunta: “¿por qué contratar un seguro de salud privado?”. Algunas, la mayoría, gozan de un carácter general, aplicable a casi cualquier caso partiuclar. Así, numerosas encuestas revelan como motivos principales para contratar un seguro de salud privado la posibilidad de elegir el médico que llevará a cabo el tratamiento, la flexibilidad de horarios para acudir a las consultas, el ambiente de familiaridad que se genera por los dos motivos anteriores, así como por la atención personalizada que estos centros, con una oferta y una demanda más controladas que los públicos, pueden ofrecer. También suelen destacarse las comodidades que se reciben en caso de hospitalización, casi siempre con habitaciones individuales y una gama de servicios asociados mucho más amplia y diversa. Por supuesto, muchos pacientes destacan también los tiempos de espera mucho más reducidos de la sanidad privada, siendo esta una cuestión fundamental que puede salvar vidas.
Los argumentos por los que contratar un seguro de salud privado también tienen que ver con la inclusión, nada baladí, de la atención dental, una cobertura que requiere de una aportación añadida en el caso de la sanidad pública. Además, conviene recordar que la atención que se ofrece es en todo el territorio nacional, pudiendo acudir a cualquier ambulatorio u hospital con solo presentar la tarjeta de la compañía aseguradora o las credenciales asociadas.
Satisfacción de los pacientes con seguros de salud privados
Numerosos motivos en definitiva para responder a la pregunta de por qué contratar un seguro de salud privado, motivos que se refuerzan a la vista de encuestas que miden la satisfacción de los usuarios, una satisfacción que, además, muestra valores crecientes a medida que avanza el tiempo de cobertura. Por otra parte, contra las voces más disonantes procedentes de aquellos espectros ideológicos que vituperan todo lo que tenga que ver con el sector privado, hay que recordar que la existencia de esta sanidad complementaria y paralela a la pública, contribuye favorablemente a mejorar los servicios de esta última, asumiendo dos de cada diez servicios de urgencias y afrontando tres de cada diez demandas de operaciones quirúrgicas.
Menor tiempo de espera y atención exquisita
Regresando a los motivos por los que contratar un seguro de salud privado, si tuviéramos que establecer un orden de prelación entre aquellos que conducen a la contratación definitiva de la cobertura privada, algunas encuestas señalan la reducción de los tiempos de espera como motivo fundamental. Esto es lógico en la medida en que esta cuestión puede ser determinante en especialidades tan variopintas como la traumatología (atención y rehabilitación tras lesiones traumáticas), cardiología o, por supuesto, en los tratamientos oncológicos, mucho más efectivos cuanto más precoz es la detección de las células tumorales. También parece ser esencial la personalización del trato, con un seguimiento más detallado y concreto favorecido por el menor número de pacientes y por, en muchas ocasiones, una mejor calidad de las instalaciones y los equipamientos.
No es desdeñable, tampoco, entre los motivos de por qué contratar un seguro de salud privado, el trato durante los períodos de hospitalización. Los momentos en los que una persona debe ingresar en una dependencia sanitaria provocan una fuerte alteración en la agenda de sus familiares, así como una fuerte vulneración de su intimidad. Ambos hechos se ven muy mitigados, por no decir anulados, en el caso de tener contratado un seguro de salud privado, pues la atención es exquisita y casi siempre se dispone de habitación individual para cada paciente.
En definitiva, son muchas las razones por las que contratar un seguro de salud privado en España. Ello a pesar de rivalizar con uno de los sistemas sanitarios públicos más eficientes y con mayor grado de universalidad de la cobertura. Y es que, quizá por esto, los servicios que ofrecen son cada vez menos personalizados y eficaces, conduciendo a las personas a situaciones límite en la que ven afectada su esperanza de vida o la calidad de la misma. Por eso, a precios cada vez más asequibles y con servicios de una calidad cada vez mejor, los seguros de salud privados se erigen como una alternativa cada vez más sólida para familias de clase media que quieren gozar de la tranquilidad que da saber que ante cualquier contingencia de tipo sanitario podrán elegir el doctor, ser atendidos con celeridad y una calidad y un trato garantizados.